La tercera clase de drama, no ha perdido su emoción, pese a todos los días que transcurrieron debido al paro. Esa emotividad y sensibilidad que emanaba de cada persona que contaba la historia, se mantenían siempre presente.

Esta vez el objeto del cual tuvieron que platicar, era una fotografía, al igual que en las demás clases de drama, éste objeto debía tener alguna conexión en especial, en este caso era la persona o símbolo que apareciese en la foto. Comenzó la clase de drama.

Ordenamos la sala de forma que quedáramos en semi-circulo, nuestros compañeros se prepararon, hicieron un círculo en medio, abrazándose por los hombros. Contacto corporal, una forma de dar afecto, de hacerle saber al otro, que estas con el, comenzaron a meditar unos momentos lo que representaba la fotografía, que era tan importante, por la escogieron entre las miles que hay, que conexión tiene esa persona o símbolo con ellos. Fueron a un rincón de la sala, en ese estado de tranquilidad, y a medida que aparecían las fotografías iban saliendo nuestros compañeros y nos relataban quien o que era, o que representaba.

Los narradores de historias, fueron apareciendo uno por uno, a medida que nos contaban  sus anécdotas. Iba identificando a ese hermano y hermana, esa madre o padre, esa abuela etc, en mi propia vida, con mi propio entorno, pareciese que todos compartimos muchas cosas en común, mas de lo que creemos, pues sus historias, eran muy parecidas a las que he vivido yo con esas personas, los mismos sentimientos.

No todas la fotografías representaba a una persona, la fotografía es un método muy bello de captura de imagen, que puede ser dirigido hacia lo que queramos, es como capturar tu propia visión del mundo.

Gente que aun esta con nosotros, gente que ya ha dejado este mundo, emociones, momentos especiales, vida. Todo puede ser capturado en una fotografía.

Considero muy especial ese momento en que sacas los álbumes de fotos, y comienzas a ver toda tu vida, tu historia, esos antiguos ancianos que ni siquiera alcanzaste a conocer, pero ahí están capturados en ese momento. Esos momentos llenos de sonrisas, de miradas alegres, de abrazos, suelen ser capturados, por que es lo que buscamos mantener por siempre con nosotros, que permanezcan en nuestras memorias, y es por esto también que evitamos capturar fotos de momentos tristes, o discusiones, de fracasos.

La cámara mas perfecta, esa que nos permite recordar escenas, imágenes ya sean positivas o no, corresponden a las cámaras permanentes de la vida,  son nuestros sentidos, capturan momentos, visiones, tactos, sonidos, olores, tu vida y la de quienes te rodean. ¿Quien tiene vida si no tiene sentidos?, difícil pregunta, pero seria como un ser humano viviendo en un huevo, aislado del mundo.

Que fuese si no tuviéramos memoria, esas fotografías serian botadas a la basura poco tiempo después de capturadas, ya que no hay quien las reclame.

Finalizamos la clase temprano, pues teníamos mucho que estudiar. Seguimos nuestra vida, muchos se llevaron la fotografía en el corazón.